La acción social en España: entre la inflación y la responsabilidad social empresarial
Descubre cómo las empresas españolas como Mercadona, Iberdrola e Inditex enfrentan los desafíos sociales a través de estrategias de RSE para combatir la inflación y promover la responsabilidad social. Es una manera de apoyar la acción social.
VEILLE SOCIALE
Lydie GOYENETCHE
8/8/20243 min leer


La acción social en España enfrenta retos importantes en un contexto de inflación persistente y restricciones presupuestarias. Sin embargo, las empresas españolas tienen un papel clave para transformar estos desafíos en oportunidades dentro de sus estrategias de Responsabilidad Social Empresarial (RSE). Aquí exploramos cómo empresas como Mercadona, Iberdrola o Inditex están marcando la diferencia, y cómo podrían ir más allá para apoyar los esfuerzos sociales.
Mercadona: solidaridad desde los supermercados
Mercadona ya es conocida por su compromiso con la sociedad. A través de su colaboración con bancos de alimentos y organizaciones solidarias, la empresa distribuyó en 2023 más de 25.000 toneladas de alimentos a personas en situación de vulnerabilidad. Pero, ¿y si Mercadona ampliara su impacto ofreciendo productos esenciales a precios reducidos durante las crisis inflacionarias? Una iniciativa así podría consolidar su posición como líder no solo en el mercado, sino también en responsabilidad social.
Iberdrola: energía para los más vulnerables
Iberdrola ya lidera programas para combatir la pobreza energética, como su colaboración con Cruz Roja para garantizar el acceso a la electricidad de familias desfavorecidas. En un país donde el costo de la energía ha sido un problema central, la empresa podría intensificar sus esfuerzos al crear un fondo social específico para amortiguar el impacto de las facturas eléctricas en los hogares más afectados.
Inditex: moda y responsabilidad
La gigante textil Inditex ha demostrado su compromiso con la sostenibilidad, pero su RSE también abarca iniciativas sociales. En 2023, destinó más de 40 millones de euros a proyectos de educación y apoyo a refugiados. Sin embargo, ¿y si ampliara estas acciones ofreciendo programas de formación laboral para personas en situación de exclusión social dentro de sus propios centros de producción? Una medida así podría cerrar el círculo entre moda y solidaridad.
CaixaBank: una banca socialmente responsable
CaixaBank se ha posicionado como una de las entidades más activas en RSE en España. Con iniciativas como su programa de microcréditos para emprendedores y el apoyo a proyectos solidarios locales, la entidad ya hace mucho. Sin embargo, podría dar un paso más al facilitar condiciones preferenciales de crédito para comunidades afectadas por la inflación, fortaleciendo su compromiso social en tiempos de crisis.
Telefónica: conectando a los excluidos
Telefónica es un actor clave en el sector tecnológico y ha lanzado programas como "Conecta Empleo", enfocados en la capacitación digital. En un mundo cada vez más conectado, la empresa podría redoblar sus esfuerzos ofreciendo acceso gratuito o subvencionado a internet en zonas desfavorecidas. Esto no solo reduciría la brecha digital, sino que también aumentaría la inclusión social y laboral.
El contexto social: inflación y pobreza
En España, la inflación alcanzó su punto máximo del 10,8 % en 2022, antes de estabilizarse alrededor del 3,3 % en 2024. A pesar de esta mejora, los costos de la vida siguen siendo elevados para muchas familias. Además, la tasa de pobreza infantil se mantiene alta, afectando al 27 % de los niños según los últimos informes de UNICEF.
Este panorama exige una colaboración activa entre el sector público y las empresas privadas. Las estrategias de RSE pueden ser una herramienta poderosa para abordar problemas sociales críticos mientras se genera valor compartido.
El final feliz: cuando la RSE se convierte en acción real
El reto está claro, pero también lo está la oportunidad. Las empresas en España tienen la capacidad de liderar un cambio positivo, no solo mitigando los efectos de la inflación, sino también construyendo una sociedad más justa y equitativa. Tal vez no estemos en un cuento de Disney, pero con un compromiso serio con la RSE, podríamos acercarnos mucho a un final feliz para todos.