Reglas de Facebook que Todo Creador de Contenido Debe Conocer

Descubre las reglas ocultas de Facebook para compartir contenido sin que el algoritmo te marque como spam. Consejos prácticos y humor para vencer los obstáculos y conectar con tu audiencia

COMMUNICATIONWEBMARKETING

LYDIE GOYENETCHE

1/5/20258 min leer

Facebook y su tonteria
Facebook y su tonteria

En el universo del marketing digital, todos hemos escuchado que Facebook ya no es lo que era. Para algunos expertos, es la red del entretenimiento y el B2C, mientras que LinkedIn se ha convertido en el espacio “serio” del B2B. Y sin embargo, en España, muchas pymes industriales siguen recurriendo a Facebook para ganar visibilidad local, participar en grupos sectoriales o, sencillamente, demostrar que detrás de las máquinas y los catálogos también hay personas. La paradoja es que, aunque el potencial de generación de leads B2B en Facebook es real, la plataforma se comporta como un anfitrión caprichoso, con reglas no escritas que pueden hacer descarrilar cualquier estrategia.

¿Por qué importa esto? Porque los números hablan por sí solos. En promedio, las empresas B2B generan apenas 27 leads mensuales, frente a los 196,5 leads que consiguen las compañías B2C (Databox, 2023). Además, el coste medio por lead en B2B ronda los 198 USD (VIB Tech, 2024), lo que convierte cada interacción en un recurso estratégico a proteger. No es de extrañar que 85 % de los marketers consideren la generación de leads su prioridad número uno (Foleon, 2024). En otras palabras, equivocarse en la forma de compartir contenido en redes sociales no solo es un fallo anecdótico: puede costar caro en tiempo, dinero y oportunidades.

Aquí es donde Facebook complica el panorama.

Mientras que en LinkedIn puedes publicar un white paper sobre industria 4.0 con toda la seriedad del mundo, en Facebook las reglas del juego son otras. El algoritmo penaliza los enlaces externos, limita el número de publicaciones por día y sospecha de cualquier palabra que suene demasiado a “negocio” (“webinar”, “estrategia”, “inscríbete”). Todo esto se enmarca además en un cambio mayor: la desaparición progresiva de las cookies de terceros, que afectará de lleno a la publicidad segmentada en Facebook y a su famoso pixel de seguimiento. Hasta ahora, un 83 % de los marketers seguían dependiendo de esas cookies para medir resultados y personalizar campañas (TechTarget, 2024). Pero a medida que navegadores como Chrome o Safari bloquean el rastreo, la generación de leads tendrá que reinventarse apoyándose más en first-party data (datos propios recogidos en la web o CRM) y menos en el viejo retargeting.

En resumen, el reto para las empresas industriales en España no es elegir entre Facebook y LinkedIn, entre B2C y B2B, sino aprender a navegar con inteligencia en cada plataforma.

En Facebook, la clave es humanizar, adaptar el lenguaje, usar el humor y entender sus absurdas reglas internas. En LinkedIn, en cambio, se puede apostar por un discurso técnico, respaldado por estudios, cifras y propuestas de valor. Jugar en ambos tableros exige estrategia, paciencia y creatividad. Y ahí es donde entran nuestras “7 reglas no escritas de Facebook”: una guía en clave de humor para recordar que, incluso en un canal poco pensado para la industria pesada, se pueden generar interacciones valiosas, fortalecer la marca y, con un poco de suerte, convertir esas interacciones en leads que justifican el esfuerzo.

La regla del enlace externo: “No, pero quédate en el ecosistema de Facebook, por favor”

En B2C: el muro invisible del e-commerce

Para las marcas B2C, Facebook sigue siendo un escaparate de alto tráfico. No obstante, cuando una tienda de cosmética comparte un enlace directo a su e-commerce, el algoritmo reduce de forma drástica la visibilidad. De hecho, estudios de Socialinsider muestran que las publicaciones con enlaces externos generan un CTR promedio de solo 0,06 %, frente a un 0,37 % para posts nativos con video o imagen (Socialinsider, 2023).
El mensaje es claro: Facebook no quiere que el usuario se vaya a otra web, ni siquiera a comprar.

En B2B: leads caros que se pierden en el camino

Para las empresas industriales, esta regla se traduce en oportunidades perdidas. Un fabricante de componentes de automoción que invierte en un catálogo online con ficha técnica descargable y luego lo comparte en un grupo empresarial ve cómo el alcance se desploma. Y en un sector donde el 62% de las empresas afirma que la generación de leads cualificados es su mayor reto (Content Marketing Institute, 2024), no aparecer en el feed equivale a tirar presupuesto a la basura.

En LinkedIn: la legitimidad del “link”

LinkedIn funciona bajo otra lógica. Allí, los enlaces a informes técnicos, estudios de casos o páginas corporativas no solo son tolerados, sino esperados. Según HubSpot, el 80 % de los leads B2B en redes sociales proviene de LinkedIn, mientras que Facebook y Twitter juntos apenas suman un 19 % (HubSpot, 2023).
Eso sí, LinkedIn penaliza los enlaces mal integrados: un simple “lee más aquí” funciona peor que un post que contextualiza el valor del recurso antes de compartirlo.

Estrategia para sobrevivir

  • En Facebook B2C: apostar por contenido visual (vídeos, memes, carruseles) e introducir el enlace de forma secundaria (comentarios o call to action indirecto).

  • En Facebook B2B: usar casos prácticos contados en primera persona, que despierten interés antes de remitir al catálogo.

  • En LinkedIn: integrar el enlace en una narrativa de expertise. Los algoritmos favorecen los posts con interacciones significativas (comentarios, debates) más que el clic puro.

Generación de leads B2B en la industria:

 Core Update 2025, la IA y la fuerza de la prueba social frente a la regla del “no outbound link” en Facebook

Desde principios de 2025, las Core Updates de Google han transformado radicalmente el terreno del SEO. Google ha reducido hasta un 40 % de los resultados considerados “contenido de baja calidad” para priorizar la experiencia, la confianza y la autoridad (E-E-A-T: Experience, Expertise, Authoritativeness, Trustworthiness) (Endeavor Business Media, 2025). En paralelo, la llegada de los AI Overviews (resúmenes generados por IA en las SERP) obliga a las empresas industriales a demostrar aún más credibilidad y a producir contenidos que los algoritmos identifiquen como fiables (Accuracast, 2025).

En este nuevo ecosistema, la prueba social se ha convertido en un elemento clave. En el B2B industrial, donde las decisiones de compra son de alto riesgo y con múltiples stakeholders, los testimonios y referencias pesan más que nunca. Según G2 Crowd, 9 de cada 10 compradores B2B son más propensos a tomar una decisión después de leer una reseña de confianza, lo que puede aumentar la tasa de conversión hasta en un 270 % (Agence Nile, 2024). Sin embargo, el 80 % de las empresas B2B todavía no integran reseñas ni casos de clientes en su estrategia digital, desaprovechando un factor de visibilidad fundamental.

Aquí entra en juego la famosa regla no escrita de Facebook: no enviar al usuario fuera de la plataforma. Cuando una empresa industrial comparte directamente el enlace de un artículo de blog en un grupo especializado —por ejemplo, sobre logística o automatización—, el algoritmo lo clasifica como spam y reduce drásticamente el alcance. Esto significa que el persona al que iba dirigido ese contenido probablemente nunca lo verá.

La alternativa consiste en publicar el contenido de manera nativa en Facebook: fragmentos de artículos, casos prácticos resumidos, testimonios de clientes o incluso vídeos breves con ingenieros explicando soluciones reales. El enlace al blog puede aparecer en los comentarios o ser enviado por mensaje privado. Esta estrategia, conocida como social-first, permite:

  • Aprovechar la visibilidad orgánica dentro de Facebook, evitando la penalización del algoritmo que castiga los enlaces externos.

  • Reforzar la prueba social directamente en el feed, mostrando reseñas, opiniones y resultados medibles de forma inmediata.

  • Alinear la comunicación con las exigencias de Google post-2025, que prioriza los contenidos con credibilidad y validación social (E-E-A-T).

Además, la transición hacia un marketing sin cookies de terceros refuerza este enfoque. Hoy todavía 83 % de los marketers dependen de cookies de terceros para personalizar y medir sus campañas (TechTarget, 2024), pero a medida que navegadores como Chrome o Safari limitan su uso, la recopilación de first-party data y la integración de prueba social se vuelven decisivas.

En conclusión, la generación de leads en la industria B2B post-2025 ya no se basa únicamente en empujar al usuario a un blog o a una landing page. El reto es integrar la prueba social directamente en los espacios donde está la audiencia —grupos de Facebook, foros locales, comunidades industriales—, y después guiarla de manera sutil hacia el sitio web. De lo contrario, cada publicación con enlace directo corre el riesgo de convertirse en un lead perdido en el vacío del algoritmo.

La paradoja del tiempo de permanencia: cuando el tráfico desde Facebook impulsa el SEO en Google

Aunque Facebook penalice los enlaces externos dentro de su plataforma, existe una paradoja interesante: cuando un usuario de Facebook llega al sitio web y pasa más de tres minutos leyendo un artículo de blog, ese comportamiento envía una señal SEO positiva a Google. Este fenómeno se conoce como dwell time (tiempo de permanencia), un indicador de calidad que los motores de búsqueda utilizan para evaluar si un contenido satisface la intención del usuario.

Estudios recientes confirman que el dwell time correlaciona con el posicionamiento: según SEMrush, las páginas que ocupan el top 10 en Google presentan un tiempo medio de permanencia superior a los 2 minutos y 30 segundos, mientras que los contenidos menos relevantes caen por debajo de un minuto (SEMrush, 2024). En el caso del B2B industrial, donde los ciclos de decisión son largos, atraer visitas cualificadas que leen con detenimiento un caso de estudio o un análisis técnico fortalece la autoridad del dominio y mejora su visibilidad en las SERP.

Además, este tráfico no solo influye en los algoritmos, sino que refuerza la credibilidad ante Google tras la Core Update 2025, que insiste en señales de experiencia y confianza (E-E-A-T). Cuando un visitante procedente de un grupo de Facebook industrial dedica varios minutos a un blog sobre eficiencia energética o sobre automatización, no solo aumenta el tiempo de permanencia, sino que también incrementa las probabilidades de interacción secundaria (clics en otras páginas, descargas de PDFs, suscripción a newsletter). Todo ello envía a Google un mensaje claro: “este sitio responde a la intención de búsqueda y ofrece valor real”.

Por eso, aunque la regla no escrita de Facebook obligue a ser creativo con los enlaces, cada clic que logra salir de la plataforma y genera una lectura prolongada multiplica su valor. No se trata ya de volumen de tráfico, sino de calidad: un lead que lee durante 5 minutos un artículo especializado vale mucho más que 50 clics rápidos que rebotan en 10 segundos.

Conclusión: el doble filo del “no outbound link” y el poder del Pixel

En definitiva, aunque la regla no escrita de Facebook —no enviar al usuario fuera de su ecosistema— sea una de las grandes limitaciones del B2B industrial en términos de webmarketing y generación de leads, existe una paradoja evidente. El mismo Facebook que penaliza los enlaces externos ofrece a las empresas su herramienta más potente para reconvertir interacciones en clientes reales: el Meta Pixel.

El Pixel permite rastrear las acciones de los usuarios que interactúan con nuestra marca en la plataforma (clics, visualizaciones de vídeo, comentarios) y después mostrarles anuncios personalizados en función de ese comportamiento. En términos prácticos, si un directivo de una empresa de automoción en Navarra visita un post de nuestra página de Facebook sobre eficiencia energética, podemos “seguirlo” para invitarlo a leer un caso de estudio más completo en nuestro blog o a descargar un catálogo técnico.

Los datos lo confirman: según Wordstream, las campañas de remarketing en Facebook logran un CTR promedio un 10 veces mayor que los anuncios tradicionales de display, y los usuarios expuestos a remarketing tienen entre 70 % y 80 % más de probabilidades de convertir (Wordstream, 2023). Además, AdRoll estima que el remarketing puede aumentar las conversiones globales hasta en un 150 % y reducir el coste por adquisición en un 33 % (AdRoll, 2024).

Para el B2B, donde cada lead puede representar miles de euros de contrato, este efecto multiplicador es crucial. Incluso si el algoritmo limita la salida orgánica hacia nuestro blog, el Pixel garantiza que los usuarios que ya han mostrado interés en Facebook puedan ser redirigidos hacia nuestro sitio web o nuestras landing pages en un segundo momento, con mensajes más específicos. Dicho de otra manera: Facebook no quiere que saques a tus usuarios de su casa, pero te alquila la llave para que vayan a la tuya… siempre que pagues por la publicidad segmentada.

Así, la estrategia digital del B2B industrial debe aceptar esta dualidad:

  • Jugar con creatividad dentro de las reglas absurdas de Facebook para no perder alcance orgánico.

  • Aprovechar el Pixel y el remarketing para transformar esas interacciones en tráfico cualificado hacia el sitio web, generando señales SEO positivas (tiempo de permanencia, engagement, conversiones).

El reto no es elegir entre SEO, Facebook o LinkedIn, sino tejer un ecosistema coherente donde cada plataforma cumple su función: Facebook humaniza y abre puertas, LinkedIn legitima con expertise, y Google premia la calidad y la prueba social.